El flamante titular de la cartera es Jang Jong-nam, más joven y desconocido que el anterior, considerado de la línea dura del gobierno. El cambio podría suavizar las políticas de defensa del país.
El flamante ministro Jang Jong-nam, un general de tres estrellas que fue ascendido a teniente general en noviembre de 2011, tiene 50 años y hoy se dio a conocer por primera vez su participación en un acto oficial.
La agencia oficial de noticias KCNA dio cuenta de su asistencia a un evento musical del ejército en el que también participó el líder del país, Kim Jong-un, y su esposa, Ri Sol-ju.
El retirado Kim Kyok-sik estuvo apenas ocho meses al frente del Ejército y es considerado del ala más dura. Seúl lo acusa de ser el responsable de los ataques al buque Cheonan y a la isla de Yeonpyong en 2010 en el que 50 personas murieron, cuando se desempeñaba como comandante del Cuarto Cuerpo del Ejército.
El cargo asignado a Jang es el equivalente al ministro de Defensa y será supervisado por la comisión nacional de Defensa, el más alto órgano militar de Corea del Norte, presidido por Kim Jong-un.
Analistas surcoreanos ven este cambio como un intento por suavizar la política de defensa, tras varios meses de tensión entre ambas Coreas.
«Jang es considerado un miembro de las nuevas generaciones dentro del Ejército y su repentina aparición puede ser una señal de que los dirigentes de Corea del Norte buscan un cambio hacia oficiales más jóvenes,» observó un analista, citado por la agencia de noticias Efe.
En tanto, los ejércitos de Estados Unidos y Corea del Sur realizarán a partir de hoy dos días de ejercicios navales con un portaaviones a propulsión nuclear, en lo que Pyongyang consideró «una amenaza abierta y un chantaje» contra su país en un momento en que la situación está en calma tras dos meses de tensión.
En los últimos meses Corea del Norte lanzó amenazas bélicas contra Seúl y Washington, a los que acusó de estar preparando una invasión a su país con los ensayos militares conjuntos de Foal Eagle.
Sin embargo, la tensión fue bajando cuando, según fuentes de inteligencia estadounidenses, Corea del Norte replegó los misiles que había tendido en su costa oriental.