“Creo que al menos es el final de una austeridad poco inteligente (…) Los gobiernos cometieron errores y ahora tienen que decirle a su población…”, comentó el viernes el profesor Karl Aiginger, del Instituto Austríaco de Investigación Económica.
Hasta ahora estas medidas han generado una fuerte degradación social y un receso económico, según los expertos.
Por ejemplo, los jóvenes europeos no pueden encontrar empleo, pero al mismo tiempo hay quienes cobran salarios excesivos.
En la eurozona existen más de 19 millones de desempleados, y nueve de estas naciones no han podido cumplir el objetivo del 3 % de déficit.
Pese a los nefastos resultados, Alemania es el único país del viejo continente que sigue defendiendo este sistema (austeridad).
“Alemania parece haber encontrado una manera exitosa para reducir el déficit presupuestario. Pero, en su propio interés sería bueno si tuviera un mayor crecimiento. No necesita salarios tan bajos como hay ahora. En Alemania, la diferencia entre salarios altos y bajos ha aumentado. Queda mucho por hacer”, declaró Aiginger.
Los países de la zona euro atraviesan una crisis financiera que comenzó en 2008, y llevó a los Estados a implementar medidas de austeridad en contra de la voluntad de la población, que se ha visto profundamente afectada en su nivel de vida.