Mientras los sentimientos del pueblo venezolano acompañan a su líder enfermo, pidiendo por su pronta recuperación, los analistas estudian la Constitución para tratar de entender los tres escenarios posibles que podrían llegarse a dar en los próximos ocho días.

Luego de la elección de octubre, Hugo Chávez concluye su mandato el 10 de enero para asumir uno nuevo de seis años en calidad de presidente reelecto. Sin embargo su estado de salud lo tiene hospitalizado en Cuba desde el 11 de diciembre y en estado de gravedad debido al cáncer que lo afecta. Podría entonces no estar en condiciones de jurar ante la Asamblea Nacional.

Según el oficialismo, la fecha del 10 de enero, fijada en la Constitución, es postergable y por lo tanto Chávez podría juramentar más tarde ante el Tribunal Supremo. La oposición considera en cambio que si el presidente no acude a la toma de posesión, se debe declarar su «falta temporal» o «absoluta» y entonces el presidente de la Asamblea Nacional debe asumir temporalmente la presidencia de la República, puesto que el 10 de enero «culmina el actual periodo presidencial y comienza otro. En consecuencia, no existe continuación del actual gobierno».

¿Qué pasa si el grave estado de salud del mandatario terminara con su vida antes del 10 de enero? Habría que convocar a nuevas elecciones presidenciales en un plazo de 30 días.

Maduro ha tenido que asumir el gobierno y convertirse en la cara más visible del chavismo desde que el mandatario lo nombró vicepresidente y heredero político antes de partir a La Habana para operarse. Este miércoles, tenía previsto regresar a Caracas luego de pasar los últimos días junto a Chavez y seguir de cerca su evolución.

Según la Constitución, Maduro asumiría la presidencia temporal antes del 10 de enero si se diera una «falta absoluta» del presidente que entre otros supuestos incluye la renuncia, la muerte o la incapacidad física permanente, que debe ser dictaminada por una junta médica y aprobada por la Asamblea Nacional.

Maduro también asumiría la presidencia temporal si Chávez juramentara el 10 de enero pero renunciara – por razones de enfermedad – después de haberlo nombrado nuevamente vicepresidente.

Maduro, que se desempeña además como canciller, sería – según lo establecido por Chávez -, el candidato oficialista en las elecciones que deberían celebrarse en un plazo de 30 días en el caso de «falta absoluta» del mandatario.

Al mismo tiempo ocurre que el sábado, la Asamblea Nacional elegirá a su presidente para el próximo año y según los analistas las posibilidades de reelección de Diosdado Cabello son altas. Cabello es un ex militar que participó en un fallido golpe de Estado en 1992 junto a Chávez y actualmente la figura de mayor peso del chavismo después del presidente y de Maduro.

Según la Constitución, el presidente del Parlamento debe asumir la presidencia temporal en caso de «falta absoluta» de un jefe de Estado que no tomó posesión, mientras se convocan las nuevas elecciones.

Según la oposición venezolana, si se declarara la falta temporal de Chávez el 10 de enero, el presidente del Legislativo también debería tomar posesión puesto que el gobierno saliente concluyó su mandato y el nuevo no entró en funciones.