Cuando a uno le tocan el bolsillo, se defiende con garras y uñas, y eso bien
lo hacen las ISAPRES. No están dispuestas a dejar de ganar los millones
que le está rentando el negocio de la salud. Sus utilidades son cada vez más
millonarias.
¿Que pasó en el camino? Pasó que la Corte Suprema les cortó el vicio que
tenían de subir los planes de salud en forma arbitraria y sin justificación.
Y como no les resultó por el lado de la justicia se fueron a hablar con el
presidente para que armara una comisión y elaborara una nueva ley.
Obviamente en esa comisión estaban los dueños de las ISAPRES! ¡Qué
menos!
¿Y que salió de esa propuesta de ley? UN IPC DE LA SALUD, que
considerará el alza de los insumos en la salud (valor cama, aranceles médicos,
insumos de salud, etc…)
Pero la pregunta que uno se hace es la siguiente: ¿No están los planes de
salud fijados en UF?
Por ejemplo si mi plan de salud es de 2 UF. A principio de año valía: $44.592
y a fin de año vale: $ 45.682 (es decir un reajuste de un 2.4%). Y esto es así
porque la UF se reajusta en base al IPC. Y si a eso se agrega un IPC de la
salud, habría un doble cobro, ya que en el IPC normal ya está incluida el alza
del sector salud.
Con esta propuesta de ley se quiere validar el alza unilateral e injustificado de
los planes de salud.