Iván Novotny | Pressenza
Corría la década del 60´ en un mundo bipolar fuertemente marcado por la violencia. Vietnam, la Guerra Fría, la escalada armamentista nuclear con los recientes experimentos en Hiroshima y Nagasaki eran el signo de la época. Por otro lado se encendían los levantamientos juveniles en diversas partes del globo. En este marco de caos creciente, un hombre de 31 años lanzó al mundo su mensaje el 4 de mayo de 1969 a los pies del monte Aconcagua, porque la dictadura argentina de Juan Carlos Onganía le impidió hablar en las ciudades.
El documental El día del fin del Sufrimiento revive aquella histórica jornada a través del testimonio actual de sus protagonistas. El estreno tendrá lugar el próximo domingo 16 de septiembre a las 18 en el Parque de Estudio y Reflexión Carcarañá próximo a la ciudad de Rosario (ruta 34, km. 35, Lucio V. Lopez, Santa Fe). La producción ya tiene acordada proyecciones en distintos espacios culturales, cines, festivales, salitas de El Mensaje de Silo, sedes de organizaciones sociales y Parques de Estudio y Reflexión ubicados en distintas provincias argentinas y en varios países de Latinoamérica y Europa.
Mediante una profunda investigación periodística junto a imágenes de archivo que ilustran el momento, el largometraje documental de Patricia Lacolla, Iván Novotny, Soledad Nasif y Nicolás Blanco da cuenta de la primera arenga pública de Silo en Punta de Vacas, La curación del sufrimiento, intentando sumergir a los televidentes en los significados de aquel mensaje. Las pinturas digitales del artista chileno Rafael Edwards y las composiciones musicales de Luca de Acha Lacolla acompañan el desarrollo de aquel testimonio, donde se habló de cómo los deseos groseros llevan al ser humano a la violencia, de los distintos modos de manifestación de esa violencia y de cómo superarla mediante la fe interna, la meditación interna, elevando el deseo y saliendo de las falsas puertas para acabar con esa violencia en uno mismo y en el mundo.
A dos años de la partida física de Silo, hoy guía espiritual de miles de personas en el mundo, de organizaciones sociales, políticas y culturales, El día del fin del sufrimiento rescata un hito esencial en la historia del siloísmo, nada más ni nada menos que su hito fundacional.