Las políticas que consideran a la gente no son habituales.
En la sesión inaugural de la 14° Cumbre del Mercosur, Cristina Fernández se refirió al obligado e imprevisto tema central de este encuentro de presidentes -la crisis institucional paraguaya- anunciando las resoluciones tomadas al respecto por los países miembros.
La presidenta explicó que la medida de suspensión temporal de Paraguay no irá acompañada de medidas económicas porque se tuvo en cuenta que éstas afectan la calidad de vida de los habitantes, y que es de interés para los países implicados en el Mercosur no perjudicar a sus pueblos.
Para Micky Hirsch, fotógrafo de esta Agencia que estuvo presente en la sesión, la determinación de no aplicar sanciones económicas calza con la coherencia que se espera de parte de un grupo de países que ha votado en reiteradas ocasiones por el fin del bloqueo económico a Cuba.
La suspensión de la participación del Paraguay tendrá vigencia hasta tanto no se restituya en ese país una institucionalidad tal como la que fuera interrumpida recientemente. Esto debiera producirse como resultado del proceso eleccionario a llevarse a cabo en abril del 2013.
Otra decisión adoptada por la Cumbre se refiere a la incorporación de la República Bolivariana de Venezuela al Mercosur, suceso que tendrá lugar el próximo 31 de julio en Río de Janeiro. Este acuerdo, cabe destacar, ya unía las voluntades de Brasil, Uruguay y Argentina, pero faltaba la aceptación de parte del Paraguay, negada hasta hoy por el veto de parte del Congreso paraguayo.
Cristina Fernández destacó la capacidad de resolver las dificultades de los países de América del Sur mediante entidades propias, sin duda con la intención de valorizar la creciente autonomía que se manifiesta en la región y de marcar la diferencia con la larga etapa anterior durante la cual las decisiones políticas latinoamericanas eran manejadas por los funcionarios estadounidenses a través de organismos de pantalla como la OEA.