El Movimiento 15M ha tenido una fuerte cobertura mediática pero desde una perspectiva que desvía el interés prioritario de este aniversario indignado. Se están priorizando los desalojos y detenciones, de tal modo que pareciera que lo único que ocurre es esto.
Siendo importante, ya que se trata del derecho de manifestación pacífica, de libertad de expresión y la imposibilidad –a ciertas horas- de poderla ejercer, no es lo fundamental de estos cuatro días de aniversario.
Por otro lado, los medios de comunicación ‘tradicionales’ están poniendo el acento en si el 15M tiene potencia o ha perdido fuelle y quedará como una anécdota romántica. Nosotros hemos podido comprobar que ha habido una movilización de cientos de miles de personas en todo el país; asambleas de miles de personas debatiendo y poniendo en común y un trabajo maduro y con el futuro abierto.
Sólo hay que ver el programa previsto para los cuatro días, por ejemplo en Madrid, los contenidos de las asambleas temáticas y generales, junto a múltiples acciones y miles de asistentes en asambleas. Para mayor información: http://madrid.tomalaplaza.net/category/comisiones/comunicacion/cronicas/
Lo que estamos viendo en las plazas cercanas y en la misma Puerta del Sol, es la síntesis de un trabajo acumulado de gran calidad en distintas temáticas. Durante este año se han conformado grupos de trabajo, que han estudiado y han generado propuestas de un alto nivel. Sanidad, Educación, Cultura, Economía, Empleo y Cooperativismo, Vivienda… son temáticas fundamentales que han sido tratadas por miles de personas muy cualificadas, con distintas percepciones e interpretaciones, lo que ha ido dando lugar a propuestas colectivas, que han supuesto –según estamos viendo- un salto cualitativo respecto a lo que estábamos habituados, el pensamiento y propuestas individuales.
Ha habido mucho trabajo, como decíamos, pero es un momento de síntesis y reflexión colectiva también. Y llegados a este punto, muchos indignados se preguntan cómo seguir adelante, qué hacer, qué futuro construir. Éste es un debate presente entre grupos de compañeros, de amigos que se encuentran y también es un tema central de las asambleas. Desde cómo seguir respecto a algo tan concreto de estos días como la respuesta ante los desalojos policiales, hasta algo que es un objetivo central de este movimiento, cómo llegar a ese 99% del que se reconoce parte; cómo generar proyectos que conecten a nivel de sensibilidad con la gran mayoría de la población; cómo conectar con la inspiración que movió millones un año atrás y que prendió la llama de un movimiento de indignados, que ha prendido en distintos países de varios continentes.
Hay, en resumen, la comprobación de que se ha hecho mucho –no podemos olvidar el papel del 15M en el tema desahucios, sin ir más lejos-, de que hay madurez, potencia… pero también está el interrogante de cómo sdar el siguiente paso. En ello, siguen en las plazas… pensando, sintiendo y actuando, y esto habla de que el Movimiento 15M está más vivo que nunca.