¡Oh! ¡maigot¡ Estoy a punto de creer que estoy escuchando voces, experimentando síntomas parecidos a los de la dietilamida de ácido lisérgico (no vayan a pensar que lo probé, por favor)… Bueno, creí por un momento que había llegado al mundo del nunca-jamás o como se llame donde vive un tal piterpan ¡¡¡¡ NO PUEDE SER POSIBLE!!!!, dije para mis adentros al escuchar que como una carambola se aprobó el aumento de asignación para los pasteles que vegetan como buchones arrellanados en mullidos asientos, lejos del mundanal y vulgar ruido. Me refiero a los senadores y las senadoras (no se hagan las tontas) ¡chan!
El Tango Siglo XX, ya quedó chico y cualquier mala palabra chilensis no le hace el peso a esta verdadera felonía, una bofetada en la cara para quienes reciben una pensión de 40 o 70 mil pesos; un escupo para quienes deben pedir casi de rodillas un medicamento a las grandes transnacionales farmacéuticas que trafican con la vida de quien no puede pagar inmensas sumas de dinero por sus «principios activos»; y qué decir de las tantas miles de mujeres que deben afrontar solas los estudios, el cuidado y la mantención de sus hijos o nietos? podríamos dar una larga lista de necesidades urgentes, necesidades vitales, de primer orden, pero aquí todo se ha trastocado y en menos que canta un gallo, en cuestión de horas, se aprobó el aumento de la asignación en 2 millones de pesos. Mandrake el Mago no lo habría hecho tan bien con una de sus artimañas.
¿Razones?… pero cómo… ¿no te queda claro que para Gastos Operacionales?… así se llama la partida, el ítem. Suena elegante, justo y necesario, padre. Entiendo… sí, como no va a ser importante tener más secretarios en el distrito, sino cómo son electos nuevamente y así electos infinitas veces hasta que se vayan con su terno de palo al cementerio y con ello, la nada que dejan detrás.
Como no va a ser importante el gasto operacional, si tienen que ir a dormir y leer el diario en las salas de ese puterío que es el Congreso, sí, sí, sí, como lo lee, puterío. Todos en la vanidad de la escena política, todos pendientes de los medios, de aparecer, de opinar a los cuatro vientos y legislar re´poco, todos luciendo un ego y un «estail» que te lo encargo, lejos de la chusma inconsciente y mal oliente, -para qué hacerles caso, allá van los secretarios en -representación- de don weón, que baja desde su sillón senatorial, sube a su auto con chofer que lo llevará nuevamente a un lugar donde hablará de -alta- política, ¡Jah!
Mmmmhhh gastos operacionales, de seguro que Alinco, por ser diputado, estaba escaso de ese ítem y lo pillaron los guardianes del orden, «sacándole punta al lápiz» en su camioneta (tal cual lo registró el Diario La Cuarta) refiriéndose a tener relaciones íntimas con una mujer cerca de su distrito, pobre. Ven que es necesario ese ítem. ¡Noooo! si la gente es tan mal pensada, no digo yo… pucha.
Ahhhh! y en chilito como es el reino de la tontera, todos se tragan el cuentito y la cancioncita del «no meta la mano ahí», refiriéndose quienes no pagamos en el transantiasco, ¿Por qué no le cantan la misma a los pasteles del senado? ¿O la asignación de 2 millones para cada uno será en billetitos de Monopoly?
El día lunes 16 de abril, estamparemos una demanda civil. Confirmaré hora. También podríamos hacer algún “escándalo”, por ejemplo cantar esa canción.
LA MUJER LAPICERA
