Al explicar la postura de su país, el representante permanente de Rusia, Vitaly Churkin, criticó los intentos de algunos miembros del Consejo de Seguridad que pretendían ese cambio de régimen en Siria.
Asimismo, consideró que el documento rechazado constituía una mala señal hacia el conflicto y para los esfuerzos de avanzar hacia una solución política, al no considerar que los grupos opositores también son responsables de la violencia en ese país.
Por su parte, el embajador de China, Li Baodong, respaldó las propuestas hechas por Rusia para enmendar el texto en discusión y lamentó que el proyecto haya sido sometido a votación sin tenerlas en cuenta.
El representante de Beijing reiteró la necesidad de propiciar una solución política a la crisis siria, a través del diálogo para restaurar la estabilidad en ese país.
La idea de un cambio de régimen no contribuye a un arreglo, sino que complica la situación en un Estado de gran importancia para la región del Medio Oriente, indicó.
El proyecto rechazado recibió los votos positivos de los otros 13 países miembros del Consejo de Seguridad: (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Alemania, Portugal, India, Colombia, Guatemala, Marruecos, Paquistán, Suráfrica, Togo y Azerbaiyán).