Recalcó que la principal garantía para encontrar una solución a la crisis es la que emane desde dentro de Siria.
Después que el Consejo Ministerial de la LA acordó extender el trabajo de observación en Siria, y el viernes último el jefe de su Oficina de Operaciones incluso anunció que una treintena de veedores viajarían esta semana a Damasco para reforzarlo, el secretario general de ese ente regional anunció el sábado inesperadamente la cancelación de la misión.
Inmediatamente, el gobierno sirio advirtió que la decisión de Nabil al-Arabi está en sintonía con el boicot que llevaron a cabo las monarquías petrolera del golfo Pérsico, encabezadas por Catar y Arabia Saudita, a fin de crear un ambiente desfavorable a Siria en las discusiones que tienen lugar en el Consejo de Seguridad de la ONU.
La RSDH condenó, a su vez, los ataques contra delegaciones sirias en El Cairo, así como la acción vandálica de la que fue objeto la Embajada de este país en la capital egipcia por parte de individuos asociados al llamado Consejo de Estambul, lo cual muestra su involucración con los terroristas.
Esta organización no gubernamental exige de los grupos llamados opositores en el extranjero a dejar de hablar en nombre del pueblo sirio, porque no son sus representantes legítimos.
Igualmente, demanda de la Comisión de la ONU que asuma sus responsabilidades legales y morales frente a lo que sucede en los países árabes, particularmente en Siria, luego que ha salido a la luz la distorsión y tergiversación de los hechos que realizan algunas organizaciones de derechos humanos a sueldo.
Urgió a que evite que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte medida alguna sobre la base de tales informaciones falsas.
