Por otro lado, el diplomático iraní destacó la colaboración de los servicios de inteligencia norteamericanos e israelíes para realizar operaciones encubiertas en Irán, lo cual incluye el asesinato de científicos de la esfera nuclear, estimó.
Además, destacó que Mustafa Ahmedi Roshan, el científico nuclear recién asesinado, además de dirigir las operaciones de la planta de enriquecimiento de Natanz, era uno de los principales interlocutores en las plásticas con el Organismo Internacional de Energía Atómica.
Las operaciones encubiertas para asesinar a científicos fueron anunciadas por los propios servicios de seguridad israelíes como el Mozad, subrayó el diplomático de la nación persa.
Al respecto, recordó que la dirección del Mozad llegó a confesar que como le era imposible frenar el programa atómico iraní por vías convencionales, buscaría hacerlo por otros medios, agregó.
En respuesta a tal acción, estudiantes iraníes presentaron su solicitud para cambiar de especialidad y optar por la de energía nuclear, en una clara señal de resistencia para Occidente, destacó.
Sadjadi insistió en que, aunque su país, abierto a las conversaciones sobre su programa nuclear, renuncie al desarrollo de la esfera atómica, Occidente siempre buscará un nuevo pretexto. Entonces será la nanotecnología o la biotecnología, comentó.
Además, defendió el derecho de su país, como firmante del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), al enriquecimiento de uranio con el fin de producir combustible para sus centrales atómicas.
Por otro lado, el embajador iraní consideró irrisorias las versiones de que lanchas de su país realizan provocaciones contra la fuerza naval estadounidense concentrada en el Golfo Pérsico. Sólo miren lo que puede hacer una lancha contra un portaaviones, apuntó.
Sin embargo, advirtió que las consecuencias de un conflicto en la región del estrecho de Ormuz y en general del Medio Oriente serán negativas, tanto por los pueblos árabes como para los propios estados occidentales.
Recordó en ese sentido que las grandes naciones colonialistas colapsaron, tras involucrarse en la I Guerra Mundial, pero de saber lo que sucedería, de seguro hubieran evitado esa conflagración. Estados Unidos debe sacar sus conclusiones sobre eso, aconsejó.