El Indicador de la Sociedad de la Información latinoamericana creció hasta 4,49 puntos en el tercer trimestre de 2011, según un estudio elaborado por el Centro para la Empresa, la consultora Everis y el IESE de la Universidad de Navarra. Hablamos con Diego Barceló, investigador de la Universidad de Navarra y coordinador del estudio.
Este indicador sobre Sociedad de la Información pretende hacer una comparación entre los valores técnicos en cuanto a acceso a las nuevas tecnologías y su contexto social y económico; es decir, analiza las repercusiones del contexto general en el acceso a las redes.
Para ello, recoge un conjunto de valores de tipo tecnológico y otras variables que rodean a la sociedad de la información: inflación, prima de riesgo, calificación de riesgo soberano e infraestructura. “La intención es ver el grado de implantación de las nuevas tecnologías en Latinoamérica con la particularidad de que esas variables tecnológicas están puestas en un contexto más amplio”, nos explica Diego Barceló, coordinador.
Según Barceló, para América Latina esta disminución de la distancia con los países desarrollados refleja el progreso que ha vivido la mayor parte de los países de la región en los últimos 20 años. El resultado de las reformas económicas iniciadas en los años 90 es: “una región con cuentas públicas estables, inflación controlada, con indicadores sociales como la tasa de desempleo, analfabetismo, pobreza, etc. todos mejorando”. Como reflejo de esta situación los indicadores de la sociedad de la información aumentan.
Sin embargo, el crecimiento no es homogéneo. El país que ha sufrido mayor aumento ha sido Argentina; por su parte, Brasil, Colombia, Chile y México han alcanzado nuevos máximos y Chile ha destacado sobre Portugal convirtiéndose en el primer país latinoamericano en superar a uno europeo.
El resultado más simbólico es el del indicador vinculado a la telefonía móvil, según el cual América Latina ha llegado a un nivel similar al de los países avanzados: tiene 1069 teléfonos por cada 1000 personas, acercándose a los 1200 de Europa y superando los 900 de EEUU.
Formar parte de la Sociedad de la Información significa formar parte de un flujo de informaciones e ideas y es una puerta abierta a la libertad de expresión y la participación ciudadana. “Una de las bases de la democracia es información corriendo libremente. Precisamente los países que no son democráticos lo primero que hacen es restringir el acceso a internet y a las redes sociales”, afirma Barceló.
Aunque el recorte de las distancias entre América Latina y los países más desarrollados viene por la disminución en los usos de Europa y EEUU fruto de la crisis económica que están viviendo, Barceló afirma que lo importante es que “se ve un progreso vertiginoso en Latinoamérica”.
En términos absolutos a América Latina todavía le falta mucho camino para alcanzar al viejo continente. Sin embargo, el crecimiento vertiginoso de los últimos años ha acortado muchos las distancias respecto a años anteriores y su progreso compite con el estancamiento de los países del primer mundo. Aunque los valores absolutos sean menores, la evolución de los números de los últimos años muestra un crecimiento imparable.