Los organizadores -univesitarios de la CONFECH y estudiantes secundiarios-, demandaron el fin al lucro en la educación, desmunicipalización de la educación secundaria y financiamiento digno a las universidades estatales. Los organizadores afirman que en Santigo hubo 200 mil personas en la calle y otras 200 mil en Regiones.
El colegio de Profesores afirmó que podrían haber marchado hasta medio millon de personas si se suman todas las manifestaciones de las ciudades de provincia.
En este contexto y cuando existen cientos de colegios y universidades ocupadas por los estudiantes, el gobierno aún no entrega una respuesta contudente a las demandas estudiantiles.
El Ministro de Educación y ex dueño de una universidad privada, Joaquín Lavin, continuó calificando las demandas ciudadanas como ideologizadas.
En tanto la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Camila Vallejos afirmó que el gobierno debe entender “que esto es un movimiento político que ha tenido una maduración importante, que lo que estamos peleando es para tener una mejor educación”.
En tanto diputados de la Concertación, coalición que avaló por dos décadas el sistema de lucro de la educación, demandaron la renuncia del Ministro de Educación Joaquin Lavin
