La empresa minera dijo que demandaría al gobierno peruano para volver a obtener su concesión. Grupos locales de indígenas exigieron el derecho a aprobar o rechazar las operaciones de minería en sus comunidades y denunciaron a las empresas por la contaminación. Los manifestantes dijeron que se seguirían resistiendo a la industria minera.

Una manifestante dijo: *“Esa gente que ha muerto tiene familiares, tiene hijos. No es posible que esté pasando todo esto acá. Nosotros vamos a brindar nuestras vidas. No es posible que nos maten a todos nosotros simplemente por defender la contaminación del Río Ramis»*.