Miles de personas se manifestaron un día más este jueves en esta transitada plaza de Madrid, donde la protesta, bautizada como el *»15-M»*, comenzó el pasado domingo convocada a través de las redes sociales.
Los manifestantes piden cambios en el actual sistema democrático, electoral, político y económico para que sea más justo, en un momento en que la economía española intenta salir con dificultades de la recesión, que dejó más del 21% de desempleo, tasa que supera el 44% entre los jóvenes de menos de 25 años.
Las concentraciones se sucedían también este jueves en varias ciudades de España, Europa y América Latina.
En la Puerta del Sol es además escenario de un campamento cada vez más organizado formado por cientos de jóvenes que se relevan para pernoctar en la plaza y participar en las asambleas diurnas.
Pretenden quedarse al menos hasta el domingo, día de las elecciones locales y regionales en España, a pesar de que la autoridad electoral de Madrid se pronunció en contra de las concentraciones porque estima que puede afectar a los comicios.
*»Estamos convocando para una manifestación para el sábado, seguimos con nuestro plan pase lo que pase, la decisión está tomada diga lo que diga la junta electoral central»*, declaró una portavoz.
La junta electoral central española debatía este jueves en una larga reunión si las concentraciones convocadas por este movimiento se ajustan a la ley, sobre todo porque el sábado es día de reflexión antes de las elecciones locales y regionales del domingo en todo el país.
El miércoles, la autoridad electoral de Madrid ya se pronunció en contra del acto en Sol alegando perjuicios en la campaña electoral.
*»La idea es aguantar»*, *»no somos políticos y no estamos haciendo campaña política»*, aseguró otro portavoz, Juan Cobo.
*»Nos dicen que el sábado nos van a desalojar de forma violenta»*, debido a que es jornada de reflexión anterior a las elecciones del domingo, *»nos dicen que la policía va a cargar contra nosotros. Cuando más carguen contra nosotros, más fuerza haremos»*, aseguró Berta Lopez, desempleada de 19 años, en el ‘stand’ de recogida de firmas.
El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, declaró este jueves que las peticiones de los manifestantes son *»legítimas»*: *»Es una protesta pacífica, merece nuestro respeto»*, reclamó.
*»Hay que escuchar»* a los jóvenes de la Puerta del Sol *»porque hay razones para que expresen ese descontento y esa crítica»*, declaró a la cadena de televisión Telecinco.
*»Aunque hoy cuesta a los jóvenes ver los resultados de las reformas, los resultados llegarán (…) Tened confianza en que las reformas que estamos haciendo son necesarias para los jóvenes»*, llamó además en un mitin electoral.
Los ya llamados *»indignados»* reclaman una reforma electoral para que ésta no beneficie a los grandes partidos, como actualmente, no gobernar para agradar a los mercados internacionales y que la política se limpie de corrupción, entre otras cosas.
*»No representamos a ningún partido político»* y *»queremos una sociedad nueva que dé prioridad a la vida por encima de los intereses económicos y políticos. Abogamos por un cambio en la sociedad y en la conciencia social»* y *»demostrar que la sociedad no se ha dormido»*, reza el manifiesto repartido en octavillas en Sol.
En la red social Twitter, donde se dispararon los mensajes al respecto, *»no tenemos miedo»* era el tema del momento después de serlo el miércoles *»acampada Sol»*, *»Spanish revolution»*, *»no nos vamos»* o *»democracia real ya»*.