Desde las primeras movilizaciones del día 15 de mayo (15-M) iniciadas con la demanda de ¡Democracia Real Ya!, en España han salido a las calles cientos de miles de personas para denunciar: el sistema bipartidista, la corrupción política y la crisis económica seguida de los rescates de los bancos por parte del gobierno con dinero público. Todo esto acompañado por recortes drásticos de los servicios públicos y el número de parados más alto de su historia. Eso sucede en un momento en que los jóvenes españoles tienen un nivel de educación más alto que nunca, pero no son capaces de encontrar trabajo y sufren un 50% de desempleo juvenil.
Campamentos, asambleas y numerosas reuniones en las plazas, más la organización de infraestructuras de apoyo a las protestas, han llevado a comparaciones con los eventos que tuvieron lugar en la Plaza de Tahrir en El Cairo hace solamente unas semanas, donde se hacía un llamamiento para el cese del gobierno de Hosni Mubarak. Sin embargo, en este caso no se quiere derrocar a un dictador sino que se lucha contra un sistema.
A través de Internet y de sus redes sociales, también aquí haciéndose eco de la Primavera Árabe, la movilización fue derivando en protestas y campamentos en casi 700 ciudades y pueblos de España, así como en comunidades españolas de residentes en ciudades de todo el mundo.
Miembros de Mundo sin Guerras en España han estado participando en los campamentos y han contribuido a las asambleas y comisiones que se han creado para elaborar propuestas comunes.
En este sentido, las propuestas de Mundo sin Guerras están muy en sintonía con las demandas del movimiento 15-M, como son.
• Reducción del presupuesto militar
• Cierre de las bases de EEUU en España
• Retiro de las tropas españolas de Afganistán y no participación en la OTAN, ni en la agresión a Libia.
• Uso estricto de la no-violencia como estrategia para el cambio social
En nuestro documento fundacional decimos:
*“La discriminación, la pobreza, el racismo y otras formas de violencia, con su consiguiente desesperanza y frustración personal y social, son el origen de una violencia de mayor alcance que tiene su expresión máxima en las armas de destrucción masiva.*
*Es por ello que también se hacen necesarios el diálogo, la cooperación y la coordinación de acciones no violentas de gran impacto entre todas aquellas personas e instituciones interesadas en un mundo mejor para todos los seres humanos. Todo lo que pasa en cualquier parte del mundo afecta a todo el mundo. En este contexto social, se hace imposible actuar aisladamente. Hoy para crear conciencia es necesario llevar nuestras acciones lo más lejos que podamos dentro de nuestras posibilidades, actuando seguramente en el ámbito local, pero con la mirada puesta en el progreso de toda la sociedad.”*
Así que felicitamos a las mujeres y hombres de España que, habiendo sido víctimas de tanta violencia económica, ahora toman la calle para decidir la dirección en la cual quieren ir. Por otra parte, deseamos que este movimiento se difunda más allá de España y de las comunidades españolas, y que llegue a todos los países y todas las comunidades del mundo. Seguramente nuestros miembros apoyarán estos procesos dondequiera que puedan. Únicamente así los cambios cosméticos—aquellos que los políticos y gobiernos militares intentarán imponer a la gente para que desistan—podrán hacerse reales; cambios fundamentales que llevarán a la humanidad hacía la Nación Humana Universal: una tierra de igualdad de oportunidades, una tierra sin ejércitos de ocupación y armas nucleares, una tierra sin pasaportes y una tierra en donde se rechaza la violencia en todas sus formas como instrumento para resolver conflictos.
Un movimiento en esta dirección es la única salida de la crisis global y personal que afecta a cada uno de los 7 mil millones de habitantes del planeta, y que es exactamente lo que el pueblo Española está trabajando para lograr.
Este planeta en donde vivimos tiene todo que necesitamos para satisfacer las necesidades de esta diversa y maravillosa población humana. La gente no tiene por qué vivir en la pobreza y la miseria, los seres humanos hemos creado este sistema que no funciona y podemos crear uno mejor que sí funcione – ¡no permitan que nadie los convenza de lo contrario!