El galardón del disidente chino, Liu Xiaobo, distinguido hoy con el Premio Nobel de la
Paz, contó con la aprobación de un diverso arco de personalidades de todo el mundo,
desde el presidente estadounidense, Barack Obama, hasta el flamante Premio Nobel de
Literatura, Mario Vargas Llosa.
«En los últimos 30 años, China hizo enormes progresos en el campo de las reformas
económicas, mejorando la vida de su población y quitando a cientos de millones de
personas de la pobreza», afirmó Obama a través de un comunicado difundido por la
Casa Blanca.
«Este premio nos recuerda que la reforma política no tuvo el mismo ritmo y que los
derechos humanos básicos de cada persona deben ser respetados, razón por la que
pedimos al gobierno chino liberar a Liu lo más rápido posible».
Obama, quien fue distinguido con el Nobel de la Paz el año pasado, recordó haber
dicho en esa ocasión que «muchos otros que habían recibido el mismo premio habían
sacrificado muchas más cosas» que él.
Jens Stoltemberg, primer ministro noruego, también aludió a los progresos económicos
y sociales del gigante asiático, y enfatizó que aún «hay desafíos que necesitan ser
abordados con respecto a los derechos humanos universales», informó la agencia de
noticias DPA.
El presidente estadounidense definió a Liu como «un portavoz valiente y elocuente para
el progreso de los valores humanos a través de medios pacíficos y no violentos, incluido
su apoyo a la democracia, los derechos humanos y a la ley».
«Esperamos que la distinción mantenga el foco de atención sobre la lucha por las
libertades fundamentales y la protección concreta de los derechos humanos, a la que
han dedicado sus esfuerzos Liu Xiaobo y otros muchos activistas en China», declaró
Catherine Baber, representante en China de Amnistía Internacional.
«Liu Xiaobo es un criminal que fue sentenciado por la Justicia china por violar la ley
china», y honrarlo «contradice por completo la finalidad del premio y es también una
blasfemia al Premio Nobel de la Paz», dijo el Ministerio de Exteriores del gobierno
chino en un comunicado.
«Me parece una magnífica noticia porque muchas veces se olvida que China, que
está alcanzando enormes éxitos económicos, sigue siendo una dictadura y bastante
monolítica», afirmó el reciente Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, en una
entrevista con el canal de televisión limeño Frecuencia Latina.