La Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares está siguiendo de cerca lo que las diferentes naciones están diciendo acerca de esa convención.

En los últimos dos días hemos escuchado a los ministros de Asuntos Exteriores de numerosos países reiterar el llamamiento para conseguir un resultado «exitoso” de la Conferencia de Revisión. ¿Pero qué define el éxito? La viceministra de Relaciones Exteriores de Noruega, la señora Gry Larsen, dijo ayer: «Nuestras ambiciones deben ser mucho mayores que simplemente ponernos de acuerdo sobre un documento final. Necesitamos un documento final que marque una verdadera diferencia”.

El Movimiento de Países No Alineados ha dejado claro que el movimiento hacia una Convención sobre las Armas Nucleares es «integral» respecto a cualquier programa de acción acordado en la conferencia. Algunos países europeos también han expresado su apoyo a un resultado centrado en la abolición. Este viernes, Noruega co-patrocinará un evento con la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares titulado «Convención sobre las Armas Nucleares: Ahora podemos», que explorará las necesidades políticas y jurídicas del objetivo cero.

China sigue siendo el único Estado en posesión de armas nucleares del TNP que ha expresado su apoyo a este enfoque, aunque el Reino Unido ha aceptado que una convención sea probablemente necesaria en el futuro. El jefe de la delegación china, el señor Li Baodong, argumentó ayer que «La comunidad internacional debe desarrollar, en el momento oportuno, un plan viable a largo plazo compuesto de acciones graduadas, que incluya una convención sobre la prohibición total de las armas nucleares».
El último orador gubernamental del segundo día de la conferencia fue el señor Nasser Bin Abdulaziz Al-Nasser de Qatar, quien destacó que la Conferencia de Revisión debe adoptar un plan de acción para eliminar las armas nucleares, y concluyó con esta nota de optimismo: «Esperamos que no tardaremos mucho tiempo en celebrar un tratado universal para el desarme y la prohibición de las armas nucleares, ya que esto es de importancia jurídica y política».

Los activistas y diplomáticos se reunieron a la hora del almuerzo para examinar las maneras de promover la idea de una Convención sobre las Armas Nucleares en esta Conferencia de Revisión. El modelo de convención elaborado por la sociedad civil fue presentado como una herramienta útil para estimular el debate. Ban Ki-moon lo describió en 2008 como un “buen punto de partida» para las negociaciones reales.

Los diez argumentos clave para avanzar hacia una Convención sobre Armas Nucleares son actualmente:

1. El enfoque minimalista respecto al desarme nuclear ha demostrado ser inadecuado: Es hora de ir más allá en el control de armas nucleares e iniciar el proceso para la abolición nuclear. El TNP ha contribuido a evitar la difusión incontrolada de armas nucleares, pero los gobiernos tendrán que negociar un marco jurídico complementario a fin de lograr la abolición.
2. Una Convención sobre las Armas Nucleares contribuiría a la aplicación del artículo VI del TNP: La negociación de una convención es la forma más obvia y realista de que los estados cumplan con la obligación de desarmarse. Una convención podría fortalecer el TNP, tal como lo han hecho otros tratados como el Tratado de Total Prohibición de Ensayos y el tratado bilateral entre Estados Unidos y Rusia sobre la reducción de armamento.
3. Existe un apoyo mayoritario a una Convención sobre las Armas Nucleares: En 2009, 124 estados votaron a favor de una resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas que pidiera el inicio inmediato de las negociaciones que llevaran a una convención, y los sondeos de opinión en 21 países muestran que, como promedio, el 76% de las personas apoyan la idea de un tratado de abolición nuclear verificable.
4. Existe la obligación legal de negociar una Convención sobre las Armas Nucleares: En 1996, la Corte Internacional de Justicia afirmó que todos los estados, incluyendo los que están fuera del TNP, tienen la obligación legal de continuar las negociaciones para el desarme nuclear y lograr la supresión total de las armas nucleares. Al igual que cualquier obligación legal, no puede posponerse indefinidamente.
5. Una convención podría reducir la brecha entre el desarme y la no proliferación: El proceso de negociación de una Convención sobre Armas Nucleares contribuiría a reducir la brecha entre los que abogan primero por la no proliferación y los que defienden primero el desarme, abordando simultáneamente tanto la no proliferación como el desarme. Así sería si se adoptara el enfoque de la abolición.
6. Una convención facilitaría el compromiso de los estados que están fuera del TNP: Las obligaciones generales contenidas en la Convención sobre Armas Nucleares sería aplicable por igual a todas las partes. En este sentido, sería distinto del TNP, que establece normas diferentes para los cinco estados que probaron sus armas nucleares antes de 1967.
7. Una convención es compatible con el avance de las etapas intermedias: Una convención complementaría objetivos tales como la entrada en vigor del Tratado de Prohibición Total de Ensayos, la negociación de un tratado sobre los materiales fisibles, y la conclusión de un tratado más amplio sobre la reducción de armamento entre Estados Unidos y Rusia. Las negociaciones sobre todos estos aspectos podrían desarrollarse simultáneamente.
8. Una Convención sobre Armas Nucleares ayudaría a crear confianza entre las naciones: Promover una mayor transparencia y responsabilidad en el proceso de desarme mediante el establecimiento de los sistemas necesarios para verificar la eliminación total de las armas nucleares. A lo largo de la implementación del tratado se establecería la confianza.
9. Se han negociado otras convenciones para prohibir otras categorías de armas: Las armas biológicas y químicas, así como las minas terrestres antipersona y las bombas de racimo, han sido prohibidas gracias a convenciones. Las armas nucleares son las únicas «armas de destrucción masiva» que aún no han sido prohibidas, a pesar de que su potencial destructivo es mayor que el de cualquier otra arma.
10. El clima político es adecuado para alcanzar la abolición de las armas nucleares: Algunos líderes han expresado recientemente su apoyo a la visión de un mundo libre de armas nucleares. Sin embargo, sin una hoja de ruta clara para llegar al objetivo cero, esta «visión» tiene pocas probabilidades de realizarse, al menos en el futuro inmediato. En esta Conferencia de Revisión, los gobiernos deben aprovechar la oportunidad histórica de avanzar en el desarme, acordando para ello empezar a trabajar para una convención.

*Tim Wright es el Coordinador del Proyecto para una Convención sobre las Armas Nucleares, Campaña Internacional por la Abolición de las Armas Nucleares.*

Traducción: Carmen Soler Rodríguez