Hoy hay todavía muchos países que castigan duramente a quienes se niegan a participar en una guerra ya sea por razones religiosas o ideológicas, a pesar de ser considerado un derecho humano consagrado por la Comisión de la ONU sobre Derechos Humanos, resolución 1998/77.
Otras formas de Objeción de Consciencia se han desarrollado en tiempos más recientes, como el derecho de desviar parte de los impuestos personales que pagan por la guerra o el presupuesto militar hacia un fondo de paz o de resolución no violenta de conflictos (a menudo llamado Objeción Fiscal). Donde esto no es aceptado como una opción legal (como en el Reino Unido) algunos individuos han sido encarcelados por retener el dinero de sus impuestos.
Durante la manifestación del 2003 antes del comienzo de la guerra de Irak muchas personas llevaban pancartas diciendo *»No en mi nombre»*, es decir, objetando la desición de su Estado de invadir otro país.
Un buen resumen de la situación de los OdeC en diferentes países y guerras se puede encontrar en Wikipedia: [en.wikipedia.org/wiki/Conscientious_objector](http://en.wikipedia.org/wiki/Conscientious_objector)