*»Creemos que aún hay tiempo para una solución negociada»*, sostuvo Lula, quien viene desplegando todos los esfuerzos posibles por frenar el conflicto.
Los dos gobiernos mediadores proponen que Irán envíe parte de su uranio levemente enriquecido a Turquía y que ese país lo intercambie por combustible nuclear que recibiría de los países occidentales y que luego mandaría a Teherán, según explicó un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.
Por su parte, el Presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad aseguró que su país constituye *»la única opción»* que le queda a Barack Obama para lograr *»el cambio»* que no ha conseguido en Palestina, en Irak o en Afganistán.
*»Lo mejor para él sería aceptar y respetar a Irán y empezar a cooperar»* con Teherán, advirtió el Presidente. *»Entonces, dispondrá de nuevas oportunidades»*, pronosticó, en medio de las sanciones que se avecinan.