Estados Unidos y China son los principales generadores de estos desechos, que a veces llegan a los países en desarrollo disfrazados de “donaciones”. El riesgo no es sólo para el medio ambiente, sino también y sobre todo, para la salud pública de las naciones receptoras.
Los desechos generados por computadoras, televisores, teléfonos móviles, y otros equipos electrónicos están creciendo a un ritmo de 40 millones de toneladas por año.
Un estudio del Programa de la ONU para el Medio Ambiente (PNUMA) afirma que al menos que se tomen las medidas apropiadas, esta situación generará graves riesgos para el medio ambiente y la salud pública, principalmente en los países en desarrollo.
El documento publicado por este organismo de Naciones Unidas afirma que los principales generadores de basura electrónica son Estados Unidos y China.
El director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner, dijo que la ola masiva de basura electrónica golpeará particularmente a los países menos desarrollados, que podrían convertirse en un basurero.
Aseguró que estadounidenses y europeos, han enviado a países africanos computadoras inservibles declaradas falsamente como donaciones. Estas terminan siendo descartadas y se convierten en un peligro para la salud de los habitantes.