Justo un mes después de la visita a Barcelona del equipo base de la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia, se ha celebrado una fiesta por la Paz y la no violencia en el castillo de Montjuïc.

Una de las actividades más visitadas, junto con la animación musical y la pintura de un mural, ha sido el rincón del fuego, donde pequeños y grandes han elevado sus deseos de paz, quemando los papeles donde los habían expresado.

El castillo de Montjuïc, que durante tanto tiempo fue sinónimo de dolor y sufrimiento, donde fueron ejecutados tantos luchadores por la libertad, se ha desmilitarizado recientemente y se ha convertido en Centro Internacional por la Paz. La historia del castillo, y sobre todo su futuro, le convierten en el ámbito ideal para expresar una vez más las aspiraciones y las demandas de esta Marcha Mundial que tiene por objetivo central crear conciencia de que la paz es posible y la no violencia es la única vía para alcanzarla.