En Kisumu, ciudad situada a orillas del Lago Victoria, cerca de 1000 personas de diferentes grupos étnicos que el año pasado se enfrentaban en una guerra civil marchan hoy unidas por la paz y la no violencia. Encabezan la marcha aquellos que más sufren los efectos de la violencia en el mundo: los niños.
Esta marcha se inició en el centro de la ciudad y terminó en los barrios pobres, habiéndose detenido delante de las principales instituciones y escuelas de la ciudad.
*(Traducción: Patricia Straulino Peacock)*