El evento donde se conmemoró el inicio de la Marcha Mundial por la Paz y la No-Violencia, en sintonía con el Día Internacional de la No-Violencia en honor a Mahatma Gandhi, realizado en el auditorio del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, contó con la presencia de los actores Juan Leyrado y Jorge Marrale, el bailarín clásico Maximiliano Guerra, la actriz Silvia Pérez, el chef Martiniano Molina, los músicos Raúl Porcheto, Miguel Cantilo y Diego Mizrahi, la banda No Lo Soporto, entre otras personalidades influyentes de la escena artística y mediática argentina.
En la entrega de reconocimientos por labores a favor de la paz, Martiniano Molina fue galardonado por su proyecto “Educación por la Paz”, que realiza en la localidad de Quilmes. El reconocimiento consistió en una grulla hecha con bronce de una bala de cañón por el Maestro Orfebre Payarolls.
En una serie de entrevistas, algunos artistas manifestaron lo que significa para ellos el proyecto de la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia y la relación que establecen entre la paz y el oficio del artista.
Juan Leirado, reconocido actor argentino, destacó la función del artista vinculada a la promoción de la paz: “Los artistas básicamente no somos violentos. La proyección del artista tiene que ver con llegar al alma de la gente, y al alma de la gente no se llega con una bomba, con un estruendo de una granada”. También reflexionó sobre la violencia como un aspecto cultural: “La maldad es un tema cultural. Ningún bebé me despierta algo así como ‘ese bebe tiene en su cabeza que va a exterminar a la raza humana, o a un amigo o una amiga o a un hermano’, después crece y va a la escuela que la sociedad le impone, al trabajo que la sociedad le impone y se va transformando en lo que esa sociedad quiere que se transforme, en alguien que haga daño para lograr cosas”.
Por su parte Maximiliano Guerra, bailarín reconocido internacionalmente y nombrado “Mensajero de Paz” por la UNESCO, manifestó su deseo de que se repita la marcha todos los años: “Este proyecto me parece maravilloso, ojalá que se pueda hacer todos los años para quitar esa absurda idea de que todo se soluciona con la guerra y matando gente. Las soluciones tienen que pasar por la humanización. Es necesario que nos unamos a la Marcha Mundial porque hay mucha violencia en todos los sectores, que tal vez no sea muy visible”
También Miguel Cantilo, cantautor, reflexionó sobre la necesidad de paz y su trayectoria: “Creo que hacer hincapié en la paz como valor es fundamental, más cuando se relaciona con las artes. Me encuentro con gente con la que cual hace muchos años venimos revalorizando la paz como un valor individual y colectivo”. A su vez contó su elección por el arte pacífico: “Hay todo tipo de arte: arte indiferente, arte pacifico y arte violento. Yo elegí el arte pacifico y siempre me sentí muy acompañado por gente como John Lennon y millones de personas que tomaron la paz como estandarte. Yo en este momento creo que la paz excede el límite de lo que puede ser un slogan, creo que la paz es una necesidad que tiene la gente, de vivirla. Y está necesidad es un camino hacia su realización, creo que este tipo de convocatoria fortalece la búsqueda de ese camino”.
Las chicas de No Lo Soporto también estuvieron presentes en el lanzamiento. Lara Pedrosa, bajista, explicó la participación de la banda: “Creo que el fin de la Marcha Mundial por la Paz es super noble. Ojalá cause un real impacto, sí una persona, de las que tienen el poder e influencias, modifica su actitud con el objetivo de disminuir la violencia, para nosotras sirvió”.
Raul Porcheto, quien cantó una canción inspirada en la paz, afirmó que “lo más importante es pensar en paz y tratar de contaminar un sistema que esta sostenido a través del miedo y de la violencia”. También compartió su opinión con respecto al armamento nuclear: “Yo soy de una época en la cual se empezaron a instalar las primeras ojivas nucleares, pero la industria ha crecido de tal forma y con tanto ocultamiento que se ha ido naturalizando el problema. Y las nuevas generaciones han crecido con esto, por eso es importante concientizar sobre el peligro”. En cuanto su oficio de cantor popular afirmó sentir “la obligación de denunciar la discriminación, los ataques a la madre tierra y difundir el valor de la paz”.
El cantante de tangos, Guillermo Fernández, reconoció que “llega un momento en que tenemos que dejar de decir que los gobiernos tienen la culpa y empezar a hacer que la paz esté permanentemente en nosotros. Creo que tenemos que tomar conciencia de una vez de que no podemos vivir en un mundo como en el que estamos viviendo, y la paz es el mejor elemento que podemos tener para pasar por arriba todos los males que nos están aquejando”.
Al finalizar el acto, todos los artistas entonaron la canción “Se alzan las voces”, compuesta por Victorio Menghi para la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia.