En Honduras, un intento de mediación de una misión de la Organización de Estados Americanos, OEA, ha encontrado resistencias.
Con una delegación de 7 ministros de RR.EE. y el propio secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, la OEA viajó a Honduras, con la intención de lograr el regreso del derrocado presidente Manuel Zelaya. El mandatario *de facto*, Roberto Micheletti, se resistió al manifestar que el retorno de Zelaya como presidente quedaba descartado.
También Micheletti dijo que las elecciones presidenciales programadas para el mes de noviembre, se realizarán según lo planeado, aun cuando otros países no acepten su resultado.
La OEA quiere que en Honduras se forme un gobierno de unidad nacional, con Zelaya como presidente, hasta los comicios de noviembre.
Estados Unidos ha intensificado la presión sobre Honduras al limitar por el momento, su servicio de visas a este país. A fines del mes de junio, Zelaya fue expulsado de Honduras por el ejército.
