Kim Dae-jung fue presidente de Corea del Sur entre los años 1.997 y 2.003, y fue un gran impulsor de las relaciones con el régimen estalinista de Corea del Norte, lo que condujo a un histórico encuentro con el presidente norcoreano Kim Jong-il en el año 2.000. Gracias a los esfuerzos del fallecido presidente, familiares de las dos Coreas pudieron reencontrarse tras años de separación. El empobrecido Norte recibió, además, la ayuda de sus vecinos del Sur.
La familia de Kim Dae-jung invitó al sepelio a las autoridades del Norte, quienes aprovecharon para efectuar una visita oficial al presidente surcoreano Lee Myung-bak. La delegación norcoreana le hizo entrega de un mensaje de su presidente Kim Jong-il. Según las autoridades surcoreanas, se trata, en cualquier caso, de un “avance en las relaciones ínter coreanas”, relaciones que se habían enfriado debido a la reanudación del programa nuclear norcoreano.